Última modificación: 2023-11-16
Resumen
La contaminación del agua potable se ha convertido en un peligro serio para la humanidad y en una preocupación política y social para las naciones de todo el mundo. Las aguas residuales industriales ahora contienen contaminantes tales como colorantes, pigmentos, pesticidas y compuestos orgánicos e inorgánicos no biodegradables. Por otro lado, el uso extensivo de diversos tipos de tintes químicos para proporcionar diversos colores en textiles, alimentos y productos curtidos es la principal causa de contaminación del agua potable. La mayoría de los pigmentos son cancerígenos y tóxicos para la vida acuática, y su utilización produce residuos que se liberan al medio ambiente. Debido a los peligrosos efectos de los materiales de desecho vertido al agua por las industrias, es menester eliminar los residuos y sobre todo los pigmentos o colorantes. Como consecuencia de la variabilidad de su configuración estructural, colorantes de tipo aniónico, catiónico, a base de -nafta, -azo, ácido, básico y derivados de complejos metálicos, se han vuelto químicamente estables. Es por ello, que la toxicidad y la estabilidad de estos contaminantes en el medio ambiente constituyen un tema complejo para los organismos reguladores de todo el mundo. En virtud de los efectos peligrosos, es esencial eliminar estos colorantes del agua potable. Éstos son susceptibles de degradar fotoquímicamente, fotocatalíticamente, y/o mediante el uso de nanopartículas, enzimas o bacterias. En particular, el colorante amarillo-5 (A-5), que se utiliza en diversas industrias, ha sido removido de fuentes ambientales por tratamiento biológico, adsorción, incineración, flotación de espuma y/o fotodegradación. Sin embargo, son las técnicas electroquímicas avanzadas y las técnicas espectroscópicas las más utilizadas para el monitoreo y control de este colorante. En este trabajo se desarrolló un método para determinar el colorante A-5 en medio acuoso mediante voltamperometría de onda cuadrada utilizando un electrodo de carbón vítreo (EGV). El A-5 exhibió un pico de oxidación bien definido a 0.66 V vs. ECS. Se utilizó esta técnica y voltamperometría cíclica para examinar la influencia del pH, el potencial de deposición y el tiempo de acumulación en la electro-oxidación de A-5 a concentraciones en el intervalo de 30 a 70 ppm.