Última modificación: 2025-06-24
Resumen
Actualmente el contexto económico está impregnado de incertidumbre comercial dadas las recientes decisiones tomadas por actores políticos. La economía del libre comercio se ha venido modificando a un intercambio de mercancía con aranceles. Ante este escenario, se debe analizar en que posición comercial se encuentra México para afrontar nuevos retos comerciales, en especial el sector agroalimentario que es un sector exportador.
De tal forma, esta investigación observa el comercio exterior de México en la era de apertura e identifica las ventajas comparativas reveladas utilizando elementos del enfoque de la economía política del comercio. Se analiza el intercambio comercial de México con sus socios en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), mediante el cálculo del índice de ventajas comparativas reveladas por Vollrath (1991), ya que, este índice permite diferenciar a los países que presentan ventaja competitiva en un producto, en particular con relación a aquellos que no la tienen y también permite comparar las tendencias de la competitividad revelada entre los países que compiten en el mercado de ese producto.
El argumento principal del libre comercio ha sido aprovechar la ventaja comparativa: explotar las ganancias de especializarse en producir lo que se produce bien en lugar de destinar recursos a la producción de aquello que se produce mal. Esas ganancias del comercio pueden ser muy valiosas, y si bien una economía de ingresos altos se puede dar el lujo de perderlas, un país pobre en recursos y productividad no puede hacerlo (Trejos, 2009). Además, se deben contemplar a los grupos vulnerables ante el comercio, buscando la forma de protegerlos.
Por otro lado, durante la época de apertura comercial el sector agrícola se ha venido consolidado como un sector exportador ante su principal socio comercial, Estados unidos, esto ya que ha ganado cuotas comerciales en frutas y hortalizas principalmente. México presenta ventajas comparativas en el sector debido al bajo costo de la mano de obra y del agua como de condiciones naturales favorables, el mejoramiento de las técnicas de producción y de corte que han aumentado la calidad del producto.