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La preocupación por formar jóvenes cuyas trayectorias les proporcionen herramientas para detectar acciones machistas, erradicar conductas sexistas o contrarrestar ambientes que alientan la violencia de género requiere reservar espacios donde se den a conocer hechos y estadísticas que constituyan insumos para reflexionar diversos temas. Por ejemplo, si en las aulas se preparan y hace uso de recursos didácticos para conocer y comprender qué es un estereotipo de género, qué se pueda entender qué es el sistema sexo-género, por qué es importante crear bases de datos que distingan datos por sexo o qué implica que el encabezado principal en El Economista sugiera que en México la principal causa de muerte en personas de 15 a 35 años de edad sean agresiones y homicidios en 2023, entre otros temas, se dará apertura para dar cuenta de las complejidades que vivimos en el país. Antes tales inquietudes, el objetivo de este trabajo es dar a conocer algunos fragmentos de diversos textos escritos por estudiantes de la comunidad universitaria, inscritas(os) en diversos programas de licenciatura (Educación, Historia, Economía) cuyas aportaciones sugieren situaciones, hechos o experiencias que demandan sugerir pautas, sugerencias o rutas que pueden auxiliar para contrarrestar circunstancias negativas y propiciar esquemas donde la igualdad o el derecho a una vida libre de violencia sean el propósito principal. La metodología consistió en invitar a un grupo finito de estudiantes a participar en una convocatoria cuyos términos facilitara la tarea de escribir un manuscrito. Los textos fueron concentrados, revisados y analizados por personal docente cuyas retroalimentaciones permitieron confirmar que cada persona requiere ser escuchada y empoderada de modo que la conjunción de voces y la réplica de buenas prácticas hacen posible imaginar personas más humanas.