Enla educación básica se debe promover el desarrollo del pensamiento científico, es decir, desarrollar la capacidad de formular ideas y representaciones mentales de forma racional y objetiva, esto mediante la curiosidad, el cuestionamiento y la creación de conocimiento. Esto se puede lograr haciendo que los niños empiecen a interesarse por la ciencia realizando experimentos de una manera divertida para captar su atención y para que sean ellos mismos los que construyan el conocimiento.

El objetivo de este trabajo fue promover el desarrollo del pensamiento científico en infantes escolarizados mediante la impartición de un taller en una sesión con una duración de 2 horas, y para el cual se diseñó y presentó diversos experimentos de óptica interactivos y divertidos.

Mediante un estudio transversal a 250 infantes escolarizados de 5º y 6º grado y la recolección de datos a través de cuestionario cerrado diseñado al efecto antes de la impartición del taller y dos semanas después de esto. La información recopilada indica que hubo un impacto positivo en los infantes escolarizados quienes muestran una mayor observación de los fenómenos ópticos a su alrededor.